Empatan la rabia y la esperanza

26 Noviembre 2019 a las 14:27

En 11 días, Hogar de Cristo, Fondo Esperanza y Techo han recogido las opiniones, necesidades, soluciones al estallido social de casi 3 mil personas que normalmente están excluidas de la toma decisiones políticas. Este resumen recoge lo declarado en 202 instancias de conversación territorial a lo largo de todo Chile. A fin de año, esperamos tener el balance de 60 mil personas consultadas.

Rabia (41,9%) y esperanza (40,1%), casi en empate técnico, es lo primero que salta en materia de emociones frente al estallido social, luego de la realización de 202 Círculos Territoriales del que han participado 2.837 personas de Arica a Punta Arenas, entre el 6 y el 17 de noviembre. Han sido hasta ahora 63% mujeres y el resto hombres, quienes han compartido sus sentimientos y pensamientos frente al despertar de Chile  en reuniones de máximo 30 personas, en los mismos territorios donde viven y se organizan.

Hogar de Cristo, Fondo Esperanza y Techo partieron este 6 de noviembre con esta iniciativa que busca darles voz a emprendedoras y a personas en situación de vulnerabilidad y pobreza, para que manifiesten sus sentimientos ante la actual crisis social, identifiquen sus causas, prioricen los problemas más urgentes que los aquejan y levanten soluciones para que por primera vez su realidad pueda ser conocida e idealmente tomada en cuenta en la elaboración de las políticas públicas que surjan de las diferentes instancias de participación ciudadana.

Paulo Egenau, director social nacional del Hogar de Cristo, lo que más rescata de esta primera etapa de trabajo es el que “estamos escuchando y dando voz a quienes viven en las fronteras de la exclusión. Considerar sus realidades, relatadas por ellos mismos, para explicarnos lo sucedido y como sociedad buscar la salida, es un deber ético en estos momentos, porque se trata de personas que arrastran historias de vulneración de derechos básicos transgeneracionalmente”.

Otros resultados reveladores de esta primera entrega de los Círculos Territoriales tienen que ver con la respuesta a la pregunta: ¿Cuáles son las causas que provocaron la actual crisis social? Las tres principales son injusticia y desigualdad (64,9%), sistema de pensiones (62,9%) y acceso y calidad de los servicios de salud (62,9%).

Entre las propuestas más recurrentes para resolver la situación de crisis están: Mejorar la salud pública, aumentar el salario mínimo, aumento de las pensiones, igualdad de derechos, fin de las AFP, cambio de la Constitución, educación gratuita, universal y de calidad, fin de las AFP e implementación de un sistema de reparto solidario, salud equitativa para todos y equidad de ingresos. Estas y en este orden fueron las diez salidas para el estallido social más mencionadas por quienes suelen ser invisibles a la hora de diseñar las políticas públicas.

Para quienes han ejercido como monitores en estos Círculos ha sido conmovedor escuchar testimonios como el de la participante de un programa terapéutico para mujeres drogo dependientes del Hogar de Cristo, quien agradeció, conmovida, que le hubieran dado la oportunidad de “expresar sus opiniones y ser considerada como ciudadana, y no como una consumidora en tratamiento, al margen del país”.

Por último, frente a la cuestión sobre qué acciones podemos hacer como ciudadanos para que este nuevo acuerdo social sea posible, los caminos que ven las casi tres mil personas consultadas fueron: actuar con solidaridad, conciencia o empatía (41%), asistir a votar (38%) y mayor participación y organización cívica (35%) y manifestarse (34%).

Lo que arroja mayoritariamente esta última interrogante a Paulo Egenau le parece “extraordinario. Lo que veo es que pese a todo lo que ha sucedido durante este estallido, las personas más vulnerables y excluidas creen en la solidaridad, en la participación, en el diálogo, y no manifiestan ningún tipo de resentimiento o deseo de venganza frente a una sociedad que ha sido ciega frente a sus necesidades y problemas”.