Día a día, de lunes a viernes, este espacio de educación inicial ubicado en Lo Espejo recibe a más de 50 niños y niñas entre los 2 y 4 años. En él reciben una educación de calidad que los preparará para el futuro. Pero, además, es un importante lugar para que muchas familias, sobre todo madres jefas de hogar, puedan salir tranquilas a trabajar.
Por María Luisa Galán
16 Febrero 2023 a las
08:47
Esta tarde será el último día para los 32 niños y niñas del nivel medio mayor del jardín infantil “Sol Naciente”. Este espacio, del Hogar de Cristo, está ubicado en la comuna de Lo Espejo, en la población Las Turbinas, y es un día especial porque ellos y ellas cumplen una etapa. Desde marzo iniciarán su pre kínder en alguno de los colegios de la zona.
Padres, madres, cuidadores, familias chilenas y extranjeras, sacaron sus mejores atuendos para acompañar a sus hijos e hijas en este fin de ciclo. Una de ellas es Carolina Solorza (33). Es segunda vez que es apoderada. Hace cuatro años estuvo su hijo mayor y, esta vez, le toca cerrar el período de jardín infantil de su hijo Franco.
“Las experiencias han sido buenísimas. La tía Vero, la tía Pía y la tía Bernardita, les han enseñado mucho a mis hijos. Los han tratado excelente. Han ayudado a que dejen los pañales. Estoy muy agradecida del jardín. Del trato con los niños, de su siesta, que duerme acá. Los aceptan como son. No los discriminan por usar pañal en medio mayor. Usa chupete y tuto; es muy mamoncito. Pero estoy feliz con las tías”, cuenta, emocionada, Carolina.
Sol Naciente
El jardín infantil Sol Naciente, atiende en total a 56 niños de entre dos y cuatro años, distribuidos en los niveles medio mayor y medio menor. Cada niño recibe alimentación completa: desayuno, almuerzo y once. Y pueden estar desde las 8:30 hasta las 16:30.
El equipo está compuesto por dos educadoras de párvulos, dos técnicos en párvulo, una manipuladora de alimentos, una auxiliar de servicios y la directora.
Mabel Guzmán es la directora de “Sol Naciente”. Dice sobre quienes egresan: “Nuestro jardín infantil tiene como sello el aprendizaje activo. Eso prepara a los niños para que, iniciando el colegio, puedan desplegar todas sus habilidades, destrezas y conocimientos. En general, todos los aprendizajes que adquieren aquí en el jardín infantil: desarrollo de la autonomía, comunicación y relación con el entorno, son la base que luego pueden desplegar en los colegios”.
La pandemia
La pandemia significó un gran cambio para los niños. Mabel cuenta que post crisis sanitaria, recibieron niños con un desarrollo lento, especialmente en la autonomía, control de esfínter y desarrollo en el lenguaje. “Eso se notó en esa generación. Muy distintos a los niños y niñas que no habían estado en pandemia. Sin duda, la pandemia afectó bastante el proceso de estimulación y desarrollo”, dice.
Fue, sin duda, un gran desafío para el equipo. “Lo que en las generaciones anteriores el equipo educativo lograba en dos o tres meses, en esta oportunidad se extendió a seis meses y a casi todo el año. Logramos nivelar pero de manera tardía, y eso se debió a que hubo que realizar un trabajo más arduo en todo el desarrollo”, explica Mabel.