El virtuoso clarinetista que eleva el espíritu
Es uno de los diez talentosos músicos que integran la sorprendente Orquesta Eleva, donde la mayoría padece alguna discapacidad visual. Él tiene ceguera total y oído musical absoluto. Lo conocimos en su segunda visita al santuario del padre Hurtado donde dejó a todos maravillados. Descubre aquí por qué.
Por Ximena Torres Cautivo
18 Enero 2025 a las 17:38
Tiene discapacidad visual total y oído absoluto. A los 21 años, Bernabé Catalán es un virtuoso del clarinete, el instrumento del que se enamoró tras probar con casi todos los de viento, y ejecutar también con maestría el piano.
-Soy ciego de nacimiento. Mi ceguera es congénita y mi diagnóstico, que es el Síndrome de microftalmia de Lenz, es súper complejo. Puede traer complicaciones en el cerebro, falta de materia blanca, retraso mental y muchas otras consecuencias. Por eso, cuando yo era apenas un bebé, mi abuela, que es una persona muy creyente, me trajo a este lugar. Esta es la segunda vez que vengo en mi vida y me siento muy feliz de estar aquí, ahora interpretando música.
El lugar al que se refiere Bernabé es el Santuario del Padre Hurtado, en la comuna de Estación Central. La orquesta a la que pertenece -Eleva, se llama-, acaba de cerrar un importante evento de inclusión y educación. Fueron el número fuerte y los invitados aplaudieron a rabiar, admirados por la calidad interpretativa de los músicos.
-Me cuentan que mi abuela me trajo con toda la familia para ofrecer una manda al padre Hurtado. Yo era guagua así es que no recuerdo nada, pero me cuentan que entonces lo que ella más temía es que la enfermedad pudiera afectarme mucho más que la vista.
No fue así. O sea, el pedido tuvo eco. Hoy Bernabé no ve. Es completamente ciego, pero escucha hasta el silencio.
-¿Qué quiere decir que tienes oído musical absoluto.
-Es una habilidad escasa que permite reconocer una nota exacta por su nombre sin ninguna referencia externa. Esta capacidad está relacionada con la memoria auditiva, lo que me permite sacar repertorios complejos en cuestión de minutos -responde Bernabé.
Él sabe que 1 de cada 10 mil personas en el mundo posee ese don, que, en su caso, considera innato. No debido a su ceguera. Aunque sí cree que su discapacidad visual lo potencia. Impacta que toque como toca sin leer una partitura. Que sea capaz de interpretar miles de canciones sin ver ni poder leer la música en Braille, porque el clarinete utiliza ambas manos.
Bernabé cursa segundo año superior de clarinete en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile y es parte de la Orquesta Eleva, un proyecto de inclusión musical y laboral. Eleva se inició en 2023, impulsada por el gestor cultural y músico Iván Bravo. Estuvo en su inicio bajo la dirección musical de Cristián Basso, profesor finalista del Global Teacher Prize internacional en 2021. Hoy la dirige Juan Pablo Ortega, quien además es el productor musical.
Su objetivo es “elevar y potenciar la inclusión de las personas con discapacidad mediante el desarrollo de la expresión musical, artística y cultural”. Una tarea en que Cristián Basso llevaba trabajando más de una década, pero que el 2023 se profesionaliza, se vuelve más exigente y se convierte en Eleva. A su propósito de inclusión, agrega la búsqueda de autonomía personal, social y económica de sus integrantes. Busca que se inserten laboralmente como músicos.
Bernabé Catalán es uno de los diez músicos que integran la Orquesta Eleva, a la que se suman otros seis colaboradores en tareas administrativas. “Él es, sin duda, el que más ha logrado aprovechar nuestro modesto apoyo. No todos tienen discapacidad visual, pero la mayoría sí y en distintos grados”, sostiene Iván Bravo.
La cantante del grupo, Agustina Rebolledo (18), quien nació con una retinitis pigmentosa, es fan de Bernabé y de su talento musical. “Es ágil, versátil y tiene una habilidad con su instrumento impresionante. Me impacta cómo logra pasar las melodías de mayor menor. Los admiro a todos, pero él es increíble”, afirma la Gugu, como la llaman todos.
La Orquesta Eleva fue invitada a este encuentro internacional del programa InclusiVet (la sigla VET significa Vocation, Education, Training), que es financiado por el proyecto Erasmus, de la Comunidad Económica Europea. Vinieron equipos de profesores de siete países que trabajan en educación superior inclusiva para capacitarse en una guía metodológica hecha por expertos de Hogar de Cristo y de la carrera de Terapia Educacional de la Universidad Mayor. El taller duró una semana hábil completa e Iván Bravo estuvo en una de las sesiones exponiendo cómo trabaja Eleva desde la inclusión musical y laboral.
El súper dotado clarinetista de la orquesta Eleva empezó a desarrollar su talento en la música desde pequeño. Agradece el apoyo que le dieron en el Colegio Santa Lucía de la comuna de La Cisterna, donde se educó. Y estar en el Conservatorio hoy, gracias al decidido apoyo de su familia y de sus cercanos.
-¿Alguna vez te sientes discapacitado?
-Finalmente, siento que es el mundo el que nos discapacita. La sociedad tal cual es hoy nos hace sentir que no pertenecemos. Y lo hace con pensamientos retrógrados, con prejuicios, buscando encapsular a las personas como yo. Por fortuna, cuento con los míos que se la han jugado para que pueda cumplir mi sueño de niño: ser músico y serlo de manera profesional. Viajar, trabajar en grandes orquestas del mundo, no tener límites.
En Chile, el 30,5% de la población adulta tiene pérdida de visión. Son 4.683.567 personas. ¿Cuántos de ellos compartirán el sentimiento de Bernabé, considerando que él posee un talento inconmensurable…?
-¿Cómo te ha ayudado Eleva?
-Eleva para mí es fraternidad. Es compañerismo. Varios de nosotros nos conocemos desde muy pequeños, porque nos hemos topado en otros grupos. Eleva se distingue por la calidad de su proyecto y de su música. Sobre todo por su calidad musical.
Dentro del grupo, Bernabé es una estrella. Un lujo. Es notable como su gusto por el clarinete, que en el Conservatorio estudia en su expresión clásica, le permite en esta instancia más profesional y práctica abordar repertorios contemporáneos de lo más diversos.
Ama el jazz, el bossa nova, el pop. El día en que lo conocimos participó de las interpretaciones de canciones como Gracias a la Vida y Mira Niñita con temas de Stevie Wonder. Un músico que es todo un símbolo para esta Orquesta inclusiva, que Eleva el espíritu al escucharla y hace creer que la inclusión no sólo es necesaria, sino posible.