Son varios los aspectos que hay que considerar al momento de elegir a la persona que va a cuidar a un adulto mayor.
Lo ideal es que esa persona cuente con alguna formación relacionada con cuidados y que esto sea verificable.
Algunos otros aspectos en qué fijarse son:
- Que tenga experiencia en tareas de cuidados y que ésta sea verificable.
- Que tenga un trato respetuoso con las personas mayores y no infantilizador. Esto significa no usar un vocabulario limitado o reducido, evitar las repeticiones y clarificaciones no pedidas por el adulto mayor, asumiendo que no entiende. Evitar el uso de un tono de voz exagerado o cantarín, como si se le estuviera hablando a un niño.
- Que tenga paciencia y empatía con los demás.
- Que sea una persona de carácter amable y cariñoso con los mayores.