Adiós a Paulo Egenau:

Terinta y ocho años de su vida profesional -casi toda-, dedicó el sicólogo al Hogar de Cristo. Este 31 de julio se despide de sus funciones de director social nacional de la fundación, donde partió apoyando la inclusión de los jóvenes en conflicto con la justicia, abordó el mundo del consumo de alcohol y drogas y su prevención a través de Paréntesis, y luego amplió su acción a todas las líneas de trabajo social. Deja una impronta de seriedad, profundidad, investigación académica y ciudadana, basada en la evidencia y reflejada en innumerables publicaciones especializadas. Fue además un vocero sobresaliente, como lo demuestra esta selección de sus dichos.

Comunicaciones Hogar de Cristo

25 Julio 2023 a las 15:28

Paulo Egenau es psicólogo y máster en drogodependencia. Pero sobre todo es una máquina de armar frases que resumen el ideal compartido por todos los que trabajamos en el Hogar de Cristo: hacer de Chile un país más digno y justo.

Además en un hombre guapo, de pecho en alto, frente amplia y ojos transparentes, que con voz firme instala sus dichos inspiradores y los deja resonando. Un vocero y un comunicador que interpela.

Para no perder “la lucidez transitoria” de la pérdida que significa su partida, recogemos aquí sus frases más resonantes y, por lo mismo, inolvidables.

A continuación, va el concepto en grandes titulares y, luego, el desarrollo de la frase:

LOS POBRES SON SUJETOS PRIVILEGIADOS DE DERECHO

“Las personas en situación de pobreza son sujetos privilegiados de derecho. Es decir, tienen más derechos que el resto para hacer realidad esta pretendida intención de igualdad. Primero a los que menos tienen, después a los que tenemos más”.

EL OLVIDO NEGLIGENTE

“El fracaso del Estado en materia de políticas de infancia es absoluto. Es una negligencia política histórica de todos los gobiernos, independiente del color político. Es un olvido negligente”.

No quería hablar, pese a su elocuencia proverbial cuando se trata de referirse a la pobreza, pero tuvo que hacerlo el día de su despedida oficial en un acto lleno de emociones.

NO EXISTEN LOS DESERTORES ESCOLARES

“Tenemos un sistema educacional intolerante con las personas que nacen y crecen en pobreza. Los profesores sólo saben manejarse con niños bien portados y en contextos contenidos. Los estudiantes olvidados por el país no son desertores, ya que este término supone un abandono consciente, que pone toda la responsabilidad en la persona que dejó el colegio y exculpa al sistema”.

Benito Baranda y Ricardo Torres, compañeros de ruta de Paulo Egenau en toda su primera etapa en el Hogar de Cristo, hace más de 30 años, este martes 25 de julio lo acompañaron en su despedida. El 31 de julio, cuando se celebra a San Ignacio, será su último día de trabajo en la fundación.

LA EVIDENCIA INTERNACIONAL

“¿Qué podemos aprender de la evidencia internacional? Que los países que tienen buenos sistemas de protección social son más resilientes frente a las crisis”.

EL HAMBRE ARCHIVADA EN LA MEMORIA

“La amenaza de la falta de alimentación era algo que teníamos archivado en la memoria histórica y que la pandemia y las cuarentenas han reactivado”.

SIEMPRE TRES CALIFICATIVOS ROTUNDOS

Su amigo, colega y partner en el trabajo con población con consumo problemático de alcohol y otras drogas, Carlos Vohringer, recordó su tendencia a usar tres calificativos rotundos y una expresión muy suya: “la ética de la autocrítica”.

“El país por décadas ha tenido políticas públicas arcaicas, desarticuladas, inconsistentes, que no logran garantizar las trayectorias de inclusión de las personas más pobres y vulnerables de Chile”.

“La gente ya no quiere más abuso, indignidad, abandono”.

LO IATROGÉNICO

“No se ha logrado garantizar las trayectorias de inclusión de los niños bajo la protección del Estado, en el Sename, donde, en vez de reparar, se les daña más, con políticas iatrogénicas”.

LA VULNERABILIDAD RELACIONAL

“Un concepto dramático, que habla de una necesidad muy humana, es la vulnerabilidad relacional. Significa carecer de lazos sociales significativos. Quiere decir que no cuentas con personas que se ocupen de ti, te valoren y te quieran. Es una forma de capital social y, en pandemia, hemos visto esa carencia en los viejos que viven solos, por ejemplo”.

Emoción en estado puro. Parte de la familia Egenau Dell´Orto (sólo estuvo ausente por razones de trabajo una de sus tres hijas), miran el video que repasa sus casi 38 años de trabajo en el Hogar de Cristo. Junto a Paulo, está el capellán José Francisco Yuraszeck.

UN CAMBIO DE CONCIENCIAS

“Hoy debemos hacernos cargo de la absoluta despriorización en que hemos tenido a las personas más pobres, vulnerables y excluidas. El acuerdo social que falta es ponerlas primeras en la lista. Y esto no es una retórica publicitaria. Para mí, la salida a esta crisis va por ahí, aunque hacerlo requiere de una transformación total de las conciencias”.

Junto a parte del equipo de Comunicaciones Corporativas del Hogar de Cristo en la despedida. Hay consenso: perdemos a un escultor de frases interpeladoras y potentes.

LA POBREZA ES LA MAYOR VULNERACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS

“Hace una década que en Hogar de Cristo insistimos en declarar a la pobreza como una vulneración a los derechos humanos, en el sentido de que nacer y crecer en pobreza y vulnerabilidad tiene consecuencias perjudiciales para el desarrollo de las potencialidades en la vida de las personas, tanto en el presente como en el futuro”.

Su equipo de la Dirección Social Nacional lo bendice en esta despedida, junto a su mujer Andrea y dos de sus hijas.

 LA LUCIDEZ TRANSITORIA

“Cada cierto tiempo, nuestro país experimenta una suerte de lucidez transitoria, en la que podemos reconocer más de cerca las experiencias de dolor e injusticia en la que se encuentran algunas personas. Son pequeñas ventanas de realidad que se toman la agenda social y frente a las cuales es imposible abstraerse. Fue una de esas ventanas la que abrió una niña de 11 años, de nombre Lissette, quien se encontraba con una medida de protección emanada por un Tribunal de Familia, en una residencia del SENAME”.

Si te inspira la mística de Paulo Egenau, involúcrate como él en el trabajo social del Hogar de Cristo.