Casitas de muñecas, escenas con momentos únicos o paisajes decorativos son algunos de los productos en madera que crean y diseñan cuatro amigos. Comenzaron hace más de un año con este emprendimiento; hoy la pandemia les ha abierto una ventana ante un público que cada vez busca más productos hechos a mano.
Por María Luisa Galán
14 Julio 2020 a las
15:38
Érase una vez cuatro amigos con habilidades manuales extraordinarias; tanto, que decidieron crear su propio emprendimiento de casitas de muñeca hechas en madera y juguetes amigables con el medio ambiente y cruelty free, movimiento que está en contra del maltrato animal. Comenzaron en el verano del 2019 y bautizaron a sus productos como “Maderas Veta”.
“Nace con la idea que teníamos junto a Víctor Gaviola de trabajar en carpintería. La idea era confeccionar productos en madera, porque a los dos nos gustaba. En un principio, buscando hacer reciclaje. En distintos lugares uno ve muchos escombros, mucha madera que se puede rescatar, y fue en eso que en vez de hacer muebles o bancas, se nos ocurrió hacer juguetes. Investigamos y nos encontramos con la metodología de enseñanza Waldorf o Montessori, entonces dijimos por qué no hacemos algo que tenga que ver también con enseñanza, para darle un valor agregado. Con eso ideamos hacer esta casa, nuestro producto estrella”, cuenta David Maturana, uno de los integrantes del cuarteto, que es trabajador del Hogar de Cristo y técnico en rehabilitación en el Programa Terapéutico Ambulatorio para Personas en Situación de Calle, en Estación Central.
La “casa trébol” es su juguete insigne. “Traen distintas funcionalidades, vienen mesitas, cocina, sillones, todo para que interactúe una familia en un hogar”, cuenta David, quien comenta que en su caso, comenzó con el trabajo en madera inspirado en su abuelo. A la casa de muñecas se suman sus otros productos. Uno de ellos se llama “momentos”, es para público de cualquier edad y en él los usuarios pueden plasmar alguna idea o acontecimiento. Son escenarios más pequeños que la casa, es como sacar una escena de cualquiera de sus espacios. “Por ejemplo: nos han pedido un abuelo contando un cuento o un niño mirando las estrellas”, agrega David. También están los “paisajes”, como uno del sur que se puede ver en su Instagram y que sirven como un lindo adorno.
Víctor y David son quienes hacen el trabajo en madera, María Fernanda Torres es la community manager y fotógrafa, mientras Daniela Oñate, también trabajadora del Hogar de Cristo, se dedica a la confección de los artículos tejidos a crochet o a palillos y de la ropa de los muñequitos. Un trabajo en equipo que ha dado excelentes resultados. Comenzaron difundiendo a través de amigos, de los amigos de los amigos. Crearon su sitio web y redes sociales, pudiendo alcanzar a un mayor público. Precisamente, durante el primer año se dedicaron a posicionarse más que a las ventas, pero la pandemia les abrió oportunidades. “La gente está buscando productos de emprendedores, artesanales”, dicen David y Daniela. Niños fascinados, terminaciones perfectas y felicitaciones por las grandes dimensiones de los productos son algunas de las respuestas que han recibido por parte de sus clientes.
Maderas Veta tiene todo preparado para la celebración del Día del Niño este 16 de agosto y para la ocasión que el cliente los requiera. Quienes deseen adquirir sus productos, hechos a mano con mucho cariño, pueden coordinar entregas a través de su Instagram o Facebook. Colorín colorado.