Por Liliana Cortés, directora de Fundación Súmate /Publicado en La Segunda
4 Marzo 2021 a las
14:55
Llevamos años –desde 2016– buscando una solución que permita dar respuesta a los más de 186 mil niños, niñas y jóvenes que están fuera del sistema educativo, y a los que se estima se sumarían otros 80 mil a causa de la pandemia. Hemos hecho rumas con mochilas, instalaciones de aulas vacías, vitrinas de temporada escolar sin uniformes, performance musicales y toda suerte de acciones ciudadanas para llamar la atención sobre esta injusta realidad. Ve aquí un resumen de esas acciones: https://youtu.be/a45P8Z5B7Sg
Hoy estamos más cerca de dar respuesta a este tema invisible para la mayoría, ya que el Consejo Nacional de Educación acaba de anunciar la creación e implementación de una Modalidad de Reingreso Educativo. Esto viene a reparar una deuda gigante del sistema escolar chileno, una tarea pendiente con los niños, niñas y jóvenes que, por distintas razones, han debido dejar sus estudios. Muchos simplemente los dejaban, otros se integraban a escuelas de adultos, pero no existía una respuesta integral que permitiera brindar procesos diversos y flexibles a la realidad de esta población vulnerada en su derecho educativo.
La reciente aprobación por parte del Consejo Nacional de Educación –propuesta ingresada por el Ministerio de Educación el 2020- permitirá brindar espacios y alternativas flexibles para que estos niños y jóvenes puedan continuar sus trayectorias educativas, asegurando así un derecho humano fundamental, el derecho a la educación. Esto empieza a reparar la deuda con esos jóvenes a las que tantas veces hemos defraudado y dejado “pateando piedras”. Esta buena noticia no lo es sólo para los estudiantes, sino una señal de apertura a la flexibilización de un sistema ultra regulado, rígido y que, en muchas ocasiones, coarta a las comunidades educativas.
Sin duda, la implementación de la Modalidad de Reingreso es un gran avance, pero también nos plantea desafíos que debemos asumir con responsabilidad. Contar con un financiamiento óptimo -subvención de reingreso escolar-, desarrollar un proceso de implementación coordinado entre actores públicos y privados, integrar la modalidad al Sistema de Aseguramiento de la Calidad, considerando sus particularidades.
El avance que representa la aprobación de esta modalidad es rotundo y debemos cuidar su puesta en marcha, pensando en los miles de niñas, niños y jóvenes que se beneficiarán con ella. Este es un triunfo que celebramos, porque permite dar mayor dignidad a los más vulnerados de los vulnerados. Esperamos que en estos tiempos donde debatimos las condiciones del inicio del año escolar, prevalezca la mirada centrada en los niños, niñas y jóvenes que requieren dar continuidad a sus trayectorias educativas, tal como ha pasado en la decisión de creación de la modalidad de reingreso.
¿Te interesa contribuir con las escuelas y programas de reingreso de Fundación Súmate? Entonces…